Puestos malditos o cargados

Me ha sucedido en varias oportunidades que hay puestos dentro de las organizaciones que tienen alta rotación y sus sucesivos ocupantes no tienen éxito. Ocurre también que cuando llega el ocupante a esa posición la vive como si no fuera a estar mucho tiempo o se le presentan dificultades para alcanzar los objetivos, todo esto sin una causa visible o aparente. Investigando encontré los llamados “puestos malditos o cargados”, son posiciones que en su historia tuvieron ocupantes que han tenido una desvinculación injusta, que hayan sido ocupantes conflictivos o que la función haya sido creada con otro objetivo y su rol principal haya sido desvirtuado. Tener esta perspectiva nos da otra herramienta para llegar a una posible solución.

Akihiro Nishino

Las emociones

¿Quiénes son las grandes olvidadas de esta época? Sigo reflexionando, leyendo y conversando sobre lo que estamos transitando estos últimos meses, buscando recursos en mí y en otros para poder acompañar de la mejor manera. Vengo confirmando la importancia de darle un lugar a nuestra parte "soft" como la llamamos en el mundo de las organizaciones y en esa línea observo que las grandes olvidadas son las EMOCIONES, por miedo, porque el mundo laboral muchas veces no las habilita, porque no sabemos qué hacer con ellas, porque es de “blandos” y siguen las razones. Creo que es una oportunidad para darles un lugar, ponerlas delante nuestro, mirarlas, compartirlas si es necesario, aunque incomode. Veremos la mejora cuando les demos un lugar y las integremos.

Conectar con el origen...

En varios colegios de Alemania cuando vienen alumnos de otros países o regiones los invitan a que en una clase traigan alguna canción, costumbre u objeto típico para que compartan con el resto y de esa manera se sientan reconocidos también por sus raíces, así la integración tiene mayores probabilidades de ser exitosa ¿Qué sucedería si en las organizaciones implementáramos alguna acción orientada a este tipo de reconocimiento? Conectando de alguna manera con su país o provincia de origen, sus costumbres y códigos. Incluso con la cultura de la empresa anterior en casos de fusiones.

Renunciar a un trabajo

Sistémicamente hablando irse bien de un trabajo es tan importante como entrar bien. Cuando alguien se va bien también colabora a que la posición que deja quede libre de conflictos sistémicos. De esta manera la persona está más disponible para el nuevo trabajo.

¿Quién ingresa en una organización?

Sucede muchas veces que cuando tenemos que incorporar personas en las organizaciones hacemos entrevistas, estudios exhaustivos para que cumplan con el perfil y competencias requeridos y no funciona. Desde el Management Sistémico es necesario también que esa persona esté en sintonía con el sistema organizacional al que ingresa. Hemos visto que es más importante que sistema e ingresante estén en sintonía a que cumplan con el requisito de algunas competencias.

Sobre pérdidas

Buscando material para una charla, encontré esta escultura de Bruno Catalano que quiere conversar sobre la pérdida y el vacío. Me impactó, sentí que era muy actual y me di cuenta que hablamos poco sobre pérdidas. No hay espacio para la tristeza, el miedo y la fragilidad. Queremos borrar todo instantáneamente con un pensamiento rápido, una pastilla y seguir a la próxima reunión. Este camino demanda mucha energía y está lejos de la solución. Un buen comienzo sería dar espacio, poder conversar, compartir y dar lugar a esas emociones a las que no estamos tan acostumbrados a manifestar sobretodo en el mundo del trabajo.